Al inaugurar el presente ciclo escolar 2023-2024 el 28 de agosto, la autoridad educativa federal señalaba que los nuevos materiales didácticos para primaria y secundaria ya habían sido entregados en 26 entidades federativas del país.
Previo al presente ciclo escolar, los medios de comunicación y las redes sociales destacaban que los nuevos libros de texto contenían un sesgo ideológico, situación que provocó que asociaciones de padres de familia se inconformaran mediante recursos legales, en contra de su elaboración y por tanto de su distribución.
Pero a pesar de esta controversia, la Secretaría de Educación, señalo que no detendrían la elaboración y entrega en las escuelas de educación básica de todo el país de los nuevos materiales didácticos. Al tiempo de enfatizar que la denominada "Nueva Escuela Mexicana" se encuentra basada en "un modelo educativo profundamente humanista, científico, multicultural e inclusivo, que pone en el centro el bienestar de los estudiantes y la autonomía profesional de los docentes".
Esta postura sin duda es preocupante en primera instancia para los padres de familia, quienes alzando la voz; las autoridades no atienden a la norma constitucional y, debido a la carestía de la vida, no podrán proporcionar a sus hijos un mejor nivel de enseñanza y de calidad, que tal vez lo represente la privada, para hacer frente a los retos que depara el destino a las nuevas generaciones.
Situación que preocupa, debido a la forma en que siguen varios gobiernos de América Latina, alineados al modelo chavista y, con el actuar del gobierno mexicano, se transita en esa ruta, con el pretexto de fortalecer su 4ta transformación, a través de reglas o decretos y evocando al pasado, el presidente López Obrador lo sustenta con el principal objetivo de mantener el poder absoluto. Pues si bien es cierto que los libros de texto tienen errores gramaticales y conceptuales, que superan por mucho los 20 que señala el funcionario responsable, quien ante estas lamentables fallas ahora denomina “áreas de oportunidad”.
Adentrándose en la revisión, en efecto se deben modificar diversos contenidos respecto a la inclusión y la sexualidad, hacer adecuaciones no solo de forma sino de fondo, pues dado el señalamiento de expertos (los docentes frente a grupo), se tiene que evitar la confusión de los estudiantes en el aspecto cognitivo, para no afectar su proceso de desarrollo físico y mental. Situación que debe ser congruente con el artículo tercero Constitucional, el cual establece que
“El Estado priorizará el interés superior de niñas, niños, adolescentes y jóvenes en el acceso, permanencia y participación en los servicios educativos”, es claro su incumplimiento ante la serie de irregularidades que están presentando y sin duda alguna los libros de texto, que representan la principal herramienta para la formación cívica y educativa, sus contenidos deben invariablemente sustentar el derecho a una educación
DE CALIDAD. Por tanto, quiero suponer que el gobierno en turno y, por el bien de México, debe ante cualquier situación o echo involuntario o indebido, anteponer y eliminar todo tipo de interés, que contravenga o comprometa el desarrollo presente y futuro de la niñez y la juventud.
Pero lamentablemente los nuevos libros de texto representan parte de la postura Estatal por afianzar la verdad oficial de un México dividido y que ahora a través de los textos se imponga una nueva doctrina ideológica y, el pluralismo se vea estigmatizado.
No debemos retroceder en una materia tan importante para el desarrollo del país y de sus habitantes como la educativa. Más aun, tomando en consideración que el mundo cambia de manera vertiginosa. El desplome puede ser muy lamentable para nuestro país y, si la gente en general está satisfecha, incluyendo al magisterio con lo que el Estado proporciona; él mismo no se verá obligado a mejorar los estándares educativos. Sus comentarios jrobertofl2021@outlook.com
Publicar un comentario