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Captan a cuatro hipopótamos 'apoderándose' de una autopista en Colombia






  La presencia de esos mamíferos, llevados al país por el fallecido narcotraficante Pablo Escobar, causa impactos negativos en el medioambiente. Cuatro hipopótamos que caminaban bajo la oscuridad y la lluvia fueron captados en un video que se hizo viral mientras se desplazaban en las cercanías de la vía que comunica la capital colombiana, Bogotá, con la segunda ciudad del país, Medellín. Según varios reportes de los medios, estos mamíferos se encontraban en el corregimiento de Doradal, perteneciente al municipio antioqueño de Puerto Triunfo



. En el clip se les ve cruzar en manada la autopista Medellín-Bogotá y dirigirse hacia una zona boscosa. Esta no es la primera vez que son vistos por la zona estos animales de origen africano que fueron llevados a Colombia por el fallecido narcotraficante Pablo Escobar. En abril pasado, se reportó la muerte por arrollamiento de un hipopótamo en el mencionado municipio, cerca del Parque Temático Hacienda Nápoles, que funciona en la antigua propiedad del fallecido capo de la droga y jefe del Cartel de Medellín. Actualmente, según datos del Ministerio de Ambiente, hay 169 hipopótamos en el país. ¿Qué ocurre con los hipopótamos?



 A principios de agosto, el Ministerio de Ambiente anunció un plan que implementará el Ejecutivo para esa especie y que consiste en "el manejo ecosistémico, el control poblacional de la especie y el plan de manejo con componente ético y altos protocolos". En marzo de 2022, esa cartera declaró a esos mamíferos como una especie exótica invasora por el impacto negativo en el ecosistema local y las especies nativas. Las heces de los hipopótamos cambian la composición de los ríos y podrían impactar el hábitat de manatíes, nutrias y capibaras o chigüiros. Hasta ahora existe una solicitud de traslado de 85 paquidermos, de los cuales 60 irían a India, 15 a Filipinas y 10 a México. El proceso ha sido lento porque, por ser la primera vez que se exporta ese tipo de animal, se necesitan controles rigurosos.

 En 1981 Pablo Escobar llevó ilegalmente tres machos y una hembra de esta especie a su hacienda Nápoles. Tras su asesinato en 1993, el Gobierno tomó el control de la propiedad y no les dio un manejo adecuado a los animales, que continuaron reproduciéndose sin control. Debido a la falta de depredadores naturales y al clima favorable, los científicos han advertido que el número de estos animales podría llegar a 1.500 en 2040, lo que tendría un impacto ambiental irreversible.

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