En rueda de prensa y en su participación en el pleno, el senador Alejandro Armenta puso sobre la mesa que las evidencias sobre el fraude electoral en Puebla es una situación que lacera la democracia...
Reiteró que el grupo parlamentario de Morena promoverá que el fraude electoral sea tipificado como delito grave y adicionalmente presentó la iniciativa para prohibir la colocación de propaganda en autobús pues refirió que es un instrumento de presión para los intereses del regimen gubernamental en turno...
El pasado 1 de julio en Puebla, como en todo el país, se vivió uno de los procesos electorales más importantes e histórico para los mexicanos.
Un proceso que estuvo manchado por la violencia, la inequidad y el abuso del poder, que evidenció una elección de estado con la complacencia de los organismos electorales locales y el gobierno en turno.
A tres meses de distancia, dicha elección se ha judicializado, se han agotado las instancias correspondientes del proceso.
Ante esas condiciones, el Movimiento de Regeneración Nacional ha establecido una ruta pertinente para demostrar con efectividad el fraude fraguado por la cúpula del poder en Puebla.
Se logró la apertura de paquetes electorales con la finalidad de recabar un sinfín de pruebas consistentes en las anomalías registradas en la jornada del 1 de julio.
El Voto por Voto evidenció las violaciones a los paquetes electorales como embarazo de urnas, cambios en los paquetes, violación a las cintas de resguardo entre otros, lo que conlleva a determinar que el resguardo de dicha paquetería electoral fue vulnerada por quienes estaban a cargo del cuidado del material.
En consecuencia, estas probanzas se incorporan como pruebas supervinientes para acreditar la nulidad de la elección. Claro que hay elementos de sobra para ello.
En Puebla, el proceso aún no culmina.
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