Cuauhtémoc Blanco fue homenajeado en el partido de se despedida de México ante Israel
Cuauhtémoc Blanco fue el protagonista del partido de México ante Israel. La despedida del tricolor quedó a segundo plano. La afición llenó el estadio Azteca para decirle adiós al único de los jugadores de esta selección que no va al Mundial.
A sus 41 años el ‘Temo’ sigue siendo un ídolo. Bastó con que pisara la cancha en el calentamiento para que la ovación se dejara escuchar a una sola voz en el Coloso de Santa Úrsula.
Al momento de entonar el himno nacional los aplausos resonaron al instante en que el rostro del ‘Cuau’ aparecía en las pantallas. El ahora jugador del Puebla, regresó a su casa para demostrar que nunca se ha ido.
Miguel Herrera le dio el gafete de capitán a Cuauhtémoc Blanco como reconocimiento a su trayectoria, porque el verdadero homenaje se lo rindió la gente que coreaba su nombre cada vez que tocaba el balón.
Era la fiesta del ‘Temo’ y vaya que se divirtió, fue el encargado de hacer los trucos de magia, con los botines como su única herramienta. Pasaba sin ver, devolvía de taquito, ponía el balón donde quería con sólo mirarlo. Hasta hacía lucir la polémica playera naranja, convirtiéndose en la parte mecánica del esquema del ‘Piojo’, dándole la pausa y el ritmo al tricolor.
Por eso Miguel Herrera se negó a sacarlo a los 15 minutos, tampoco lo hizo a los 20’, como se había pactado, pasaron 30’ y Cuauhtémoc seguía en la cancha. Entonces Javier Hernández y Raul Jiménez se pararon a calentar.
Fue hasta el minuto 39 cuando se anunció la salida. La gente se puso de pie, volvieron a corear su nombre al mismo tiempo en que el ‘Temo’ le entregaba el gafete de capitán a Jesús Corona. A paso lento se acercó al medio campo impulsado por una orquesta de aplausos y con la mano en lo alto y diciendo adiós.
En el medio tiempo Rafael Márquez le entregó un botín de oro en presencia de todo el equipo, Cuauhtémoc Blanco se paró en el centro del campo para mostrarlo al público, terminando con la vuelta olímpica, para demostrar que su despedida fue el ingreso a la inmortalidad…Se fue el ‘Temo’ y México ya lo extraña.
Mi poesía al mas grande . . .
ResponderBorrarIDOLO VIVIENTE
Al gran jugador,
el de más talento,
nato goleador,
un crack, un portento.
A Cuauhtémoc Blanco,
el número uno,
lo digo muy franco,
como él ninguno:
México te aclama,
sabe de fútbol,
“Temo” tienes fama,
más metiendo gol.
Tu carácter brota,
el estadio explota,
como los maestros, . . .
los tienes bien puestos.
Estrella de masas
que la clase abrazas,
juegas a tus anchas
por campos y canchas.
Tu maduración
es la de los vinos,
entras en acción,
das pases divinos.
Tocas al “desdén”,
de “taco”, ¡qué bien!,
con tu “Cuauhtemiña”
la porra se anima.
Esa pierna diestra
es tu arma maestra,
¡penales correctos!,
¡qué tiros directos!
En cada partido
del juego del hombre,
se escucha alarido,
coreando tu nombre.
Ariete letal
eres inmortal,
el diez se respeta
de tu camiseta.
Idolo viviente,
exige la gente
que muevas esférica,
por tu equipo América.
Valladolid, “Rayos”,
Santos, Selección,
Chicago, en “Escualos”,
estrella y campeón.
Aguila de fuego,
“fresero” en el juego,
te fuiste al Mundial,
“culichi” genial.
Digo con ahínco:
¡arriba Tlatilco!,
del fut eres padre,
bendita tu Madre.
Aquí lo reitero,
eres el primero,
me aprovecho y grito:
¡te adora Tepito!
El alma te arroba
jugando el balón,
no tienes joroba,
¡es . . . tu corazón!
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda
Gracias a mi carnal “Toño” Castillo y a los Clubes: “Lobos” BUAP y “Camoteros” del Puebla (de Los Angeles), por darle su merecido lugar al “Cuau”
Registro SEP Indautor No. 03-2008-101313351700-01
Mi poesía al mas grande . . .
ResponderBorrarIDOLO VIVIENTE
Al gran jugador,
el de más talento,
nato goleador,
un crack, un portento.
A Cuauhtémoc Blanco,
el número uno,
lo digo muy franco,
como él ninguno:
México te aclama,
sabe de fútbol,
“Temo” tienes fama,
más metiendo gol.
Tu carácter brota,
el estadio explota,
como los maestros, . . .
los tienes bien puestos.
Estrella de masas
que la clase abrazas,
juegas a tus anchas
por campos y canchas.
Tu maduración
es la de los vinos,
entras en acción,
das pases divinos.
Tocas al “desdén”,
de “taco”, ¡qué bien!,
con tu “Cuauhtemiña”
la porra se anima.
Esa pierna diestra
es tu arma maestra,
¡penales correctos!,
¡qué tiros directos!
En cada partido
del juego del hombre,
se escucha alarido,
coreando tu nombre.
Ariete letal
eres inmortal,
el diez se respeta
de tu camiseta.
Idolo viviente,
exige la gente
que muevas esférica,
por tu equipo América.
Valladolid, “Rayos”,
Santos, Selección,
Chicago, en “Escualos”,
estrella y campeón.
Aguila de fuego,
“fresero” en el juego,
te fuiste al Mundial,
“culichi” genial.
Digo con ahínco:
¡arriba Tlatilco!,
del fut eres padre,
bendita tu Madre.
Aquí lo reitero,
eres el primero,
me aprovecho y grito:
¡te adora Tepito!
El alma te arroba
jugando el balón,
no tienes joroba,
¡es . . . tu corazón!
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda
Gracias a mi carnal “Toño” Castillo y a los Clubes: “Lobos” BUAP y “Camoteros” del Puebla (de Los Angeles), por darle su merecido lugar al “Cuau”
Registro SEP Indautor No. 03-2008-101313351700-01